{mosimage}En su propuesta destacó su juego de colores al teñir algodones y encajes. Su colección mostró una serie de minifaldas en capas, asimétricas y algunas totalmente rectas, donde las pieles convivieron con las mezclillas y encajes.
Su gama de colores, uva y café, mostró una propuesta urbana y juvenil sin dejar de lado su lado clásico, añadiendo chamarras de piel y grandes abrigos, homenaje a Carlo por parte de la diseñadora.
Los accesorios usados fueron unas botas de piel de caña alta y una serie de bufandas teñidas por Elena.
La colección de Gómez Toussaint mostró diseños elegantes, clásicos pero poco impresionantes, {mosimage}nada fuera de lo normal, a excepción de un par de prendas que por separado funcionan mejor que en el conjunto mostrado. Aún le falta mucha evolución a la diseñadora para llegar a estar entre los grandes.
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